Arrancó el Carnaval en Río de Janeiro y Alexander Lecaros prefiere conocer un poco más de Barra da Tijuca, su nueva hogar, que es conocida por estar rodeada de una hermosa playa y condominios lujosos, en los que habitan estrellas de la talla de Bebeto. Un día caminas por esta zona y puedes encontrarte a Ronaldo, Romario o al mismo Ronaldinho. Nada menos.
“Vivo solo en un departamento. Y espero que mi familia pueda visitarme. Mi vida ha cambiado enormemente. Fue difícil todo y no pensé llegar tan lejos”, nos cuenta Lecaros, mientras espera su almuerzo luego de sumar un entrenamiento con Botafogo.
Pasaste de Cusco a una de las ciudades más grandes de Sudamérica…
Me falta poco para adaptarme al 100%. Lo estoy manejando de una manera tranquila. Me siento cómodo y la comida no ha sido problema.
¿Cómo te ha tratado el hincha brasileño?
Desde el primer día me di cuenta que tenía que ser más rápido para decidir, no me alcanzaba con lo que estaba entrenando en lo físico y potencia. Acá todo es muy exigente.
¿Ya te comunicaste con Quevedo y Pacheco?
Sí, con Fernando. Lo felicité por el nuevo contrato que hizo con Fluminense. Llegó a un equipo muy grande. Estamos cerca y hemos quedado para ir a comer a algún sitio o pasar tiempo.
¿Cómo te ha tratado Paulo Autuori?
Aún no he hablado con él de manera directa, pero se nota que todo va bien con el grupo.
¿Ya has interactuado con el japonés Keisuke Honda?
Después del entrenamiento, hablamos mucho. Él entiende más el español que el portugués. Fue una conversación lenta, pero entendible [risas].
¿No te has visto obligado a utilizar el Google Traductor?
Los primeros días, sí lo utilizaba como loco [risas]. Pero ahora entiendo mucho lo que me quieren decir.
¿Qué te han pedido trabajar?
La parte de la potencia. Además, pidieron agarrar cuerpo. Eso me ayudará bastante para mi rendimiento. También me piden que juegue más suelto, para no tener presión.
Dicen que admiras a Neymar y Messi…
Sí, me gusta juego de Neymar y Messi. Trato de hacer las mismas cosas que Neymar y Messi hacen. La llevan pegadita al balón y me identifico mucho con ellos.
¿Te has chocado con alguna estrella brasileña por la calle?
Con Beto, vivimos en el mismo condominio. Lo vi y no sabía que decirle. Me puse muy nervioso. No le pedí una foto, porque ahora lo tengo cerca. Me hizo ver sus jugadas y goles. Me aconsejó y me dijo que debo estar tranquilo en Río de Janeiro para destacar y luego ir a Europa.
Río es una tentación para cometer excesos…
Ahora se acerca al Carnaval, pero iré a ver las danzas. Solo eso.
¿Eres consciente de que representas a muchos peruanos?
Me siento contento, al igual que toda mi familia, siempre estuvieron para apoyar. Se nota que vengo de una familia muy respetuosa y tranquila. Eso me ayuda a seguir creciendo. Es una alegría para el Cusco que salga un muchacho de provincia y busque triunfar en Brasil. Quiero hacer quedar bien al Perú.
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