Werder Bremen volvió a los entrenamientos después de una para de casi tres semanas por la presencia del COVID-19. Claudio Pizarro retornó a las prácticas luego de realizar el trabajo físico en casa. El retorno de los jugadores del cuadro alemán se realizó a puertas cerradas y bajo estrictas medidas de seguridad.
“Las operaciones de entrenamiento en Werder Bremen han comenzado nuevamente. El entrenamiento en grupos de cuatro estaba permitido, pero generalmente solo dos jugadores iban juntos a la cancha. Lo que sucedió detrás de las puertas del undécimo lugar y en el Estadio Weser se ocultó a los ojos de todos”, reseñó Deichstube.
"Las unidades limitadas a cuatro jugadores tuvieron lugar en secreto en Werder Bremen. La razón es clara: nadie debería venir a mirar, porque eso sería contrario a los requisitos en tiempos de la pandemia por el COVID-19.
El equipo doctores también realizó exámenes preventivos de ingreso y examinó a todas las personas involucradas en el entrenamiento para detectar síntomas de infección.
“Estamos contentos de poder dar el siguiente paso después de semanas de entrenamiento individual”, dijo el gerente Frank Baumann. “Las medidas no plantean ningún desafío importante porque hemos estado implementando la gran mayoría durante semanas”, añadió.
La Liga Alemana de Fútbol (DFL) planea habilitarles la entrada a 239 personas a los partidos a puertas cerradas que empezarían a celebrarse a partir de mayo tras la interrupción de la temporada provocada por la pandemia del COVID-19.
En el futuro, solo permitirán que 126 personas ingresen al interior del estadio -campo de juego y alrededores- entre las que se encuentran los equipos, con solo ocho entrenadores, asistentes y médicos por equipo. Además, en la gradas, habrá 113 personas incluyendo 30 periodistas, según asegura un informe del diario alemán Bild.