A los 39 años, la carrera de un futbolista promedio prácticamente ha finalizado temporadas atrás, o en algunos casos, de extensión, se encuentra en la recta final. Un último respiro que muchas veces termina siendo un adiós que el propio fútbol le dedica al jugador, y no viceversa, como debería ser. No obstante, son muy pocos los casos donde jugadores al borde de los 40 años se mantienen en vigencia, y más aún, tocan la gloria de un continente. Estamos hablando de Paolo Guerrero, quien acaba de coronarse campeón de la Copa Sudamericana 2023 con Liga de Quito y puede empezar a escribir un último capítulo lleno de registros históricos.