Su llamado parecía un hecho. Una especie de justicia divina. Un mensaje de estímulo al grupo de Ricardo Gareca que pregona y exige oficio, entrega, perseverancia, protagonismo y, sobre todo, profesionalismo. Y Leao Butrón cumplió con todos esos requisitos públicos. Entonces, ¿qué esconde su “no” convocatoria para la fecha doble por Eliminatorias ante Bolivia y Ecuador?
Se trata de la figura del campeonato, el futbolista sin gol que fue decisivo para que Alianza Lima sea protagonista del Torneo Apertura. Por supuesto, todo lo que hizo, lo hizo bien, aun cuando su equipo perdió puntos. Pero, si hablamos de presentes, y Butrón es el mejor, también es necesario precisar que su figura se maximizó en el llano.
Entonces, eso explica, en mi primer lugar, la lógica de Gareca por conservar el tradicional tridente de porteros para enfrentar a Bolivia y a Ecuador. Contra el primero, Pedro Gallese es fijo. Contra el segundo, solo una suspensión alejaría al hombre de Tiburones de México. ¿Y quién lo reemplazaría? José Carvallo, quien goza de mucho recorrido en la altura, un especialista, capitán y subcampeón con UTC de Cajamarca del Torneo de Verano.
Si miramos un poquito más adentro, se puede interpretar que el discurso de Gareca se centra en las ‘dos P’: presente y la proyección. Eso pide, eso exige en la práctica, aunque no lo expone. Y Butrón solo cumple con lo primero. Sus 40 años se traducen en experiencia pura en un grupo que piensa en el mañana.
Leao gusta mucho, a todos, hasta a sus propios críticos. Ojo: para Gareca, no es un futbolista descartado, sino de la primera opción altamente competitiva que tiene para incluir en una familia que le ha respondido, que además protege y mantiene desde lo anímico.
Alianza Lima: el plan de Bengoechea para evitar cansancio en sus jugadores en el viaje a Cutervo