La cifra de contagiados por coronavirus en Filipinas se disparó a 2,633 casos solo en los últimos 20 días hecho que ha ocasionado que su mandatario tome medidas extremas, incluso, matar a quienes incumplan con las medidas de cuaretena.
A través de un mensaje a su país, el presidente filipino, Rodrigo Duterte ordenó a las fuerzas de la ley “disparar a matar” a aquellas personas que violen los requisitos de la estricta cuarentena en su país, tras el brote del COVID-19.
“No dudo. Mis órdenes son para la Policía y el Ejército. En caso de problemas o de una situación en que la gente se pelee y sus vidas estén en peligro, dispárenles a matar”, aseveró el mandatario en una transmisión en señal abierta.
Asimismo, precisó que pedirá a la Policía que castigue a quienes infrinjan daño contra los médicos y trabajadores de salud. “Quienes causen problemas morirán de hambre en las cárceles”, advirtió.
El Jefe de Estado de Filipinas ha criticado en todo el mundo por sus medidas extremas para corregir la delincuencia en su país. Anteriormente fue cuestionado por confinar a las personas detenidas en jaulas para perros o dejarlas expuestas al sol durante horas, según denunció Human Rights Watch.
En el mundo, el coronavirus ha llegado a más del millón de contagiados, siendo Estados Unidos el foco de contagio principal con más de 236 mil infectados. Le sigue Italia, con más de 115 mil casos confirmados y más de 13,915 muertos, desde que llegó el virus. China ha sido desplazado al quinto lugar con 82,432 contagiados.
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