Pese a su diminuto tamaño, los zorrillos son unas criaturas de temer dentro del reino animal debido a su fétido mecanismo de defensa capaz de dejar apestando a cualquiera por varios días; sin embargo, un ciclista descubrió que esa mala fama que tienen no es del todo cierta ya que al encontrarse con una familia de ellos que salió a su encuentro cuando daba un paseo descubrió otra realidad. Todo quedó registrado en un video que acumula millones de reproducciones en YouTube y otras redes sociales.
Todo ocurrió un tranquilo día en el parque nacional Pointe-Taillon de Quebec, Canadá, cuando el ciclista vio a una bola de pelos de color negro con blanco que se acercaba hacia él. Al aminorar la marcha para asegurarse de no chocar contra la criatura, se detuvo y decidió grabar el encuentro a medida que se aproximaba, percatándose que se trataba de una familia de zorrillos, quienes parecían entusiasmados de conocer al repentino visitante.
Cualquiera se hubiera apartado del camino por temor a que lo rocíen, pero el ciclista mantuvo la compostura y le devolvió el saludo a los zorrillos, que comenzaron a olfatear las llantas de su bicicileta y su calzado. Al observarlos de cerca, descubrió que se trataba de una mamá zorrillo y sus cuatro crías, que sentían mucha curiosidad de la persona sobre las ruedas gigantes que se atravesó en su camino y no dejaban de emitir agudos sonidos durante el encuentro.
Afortunadamente, la mamá zorrillo no se sintió amenazada por el ciclista sino la historia hubiera tenido un final completamente distinto. Después de pasar un rato con su nuevo amigo, esta familia prosiguió con su camino y el otro protagonista del video viral por el suyo, sabiendo que estuvo en el lugar y momento correcto para capturar esta increíble escena que no suele verse a menudo en el Internet.