La Navidad es una fecha muy especial, ya que ese día es usual que las familias se reúnan; sin embargo, para algunas personas ese día suele ser muy triste porque no pueden visitar a sus seres queridos o hay familiares que ya no pueden festejar con ellos la festividad.
Esta situación puede generar una gran carga emocional y eso afecta la salud mental. De acuerdo con el psicólogo Paul Brocca, docente de la Universidad Científica del Sur hay momentos del año como la Navidad que están muy cargados de contenido afectivo y recuerdos que pueden generar estrés y ansiedad.
Por ello es importante que las personas tomen algunas medidas para que puedan disfrutar la celebración sin afectar su salud mental. A continuación, el especialista brinda algunas recomendaciones para lograrlo.
Aunque la Navidad es una fecha que está relacionada con sentimientos de alegría, también es válido estar triste. Recuerda que cada persona pasa por situaciones diferentes, así que no pases por alto tus emociones.
Es usual que al acabar el año, las personas analicen sus logros y si lo conseguido va con las metas que se propusieron. Recuerda que no cumplir una meta no es el fin del mundo y evita exigirte mucho porque eso puede ocasionar sentir una presión que tal vez no puedes tolerar.
“Aquellas personas que asocian estas fechas con experiencias poco gratificantes, como la pérdida de un ser querido, son las más vulnerables. Ya que estas fechas pueden generar dolor, muchas veces intentamos limitar o suprimir nuestros sentimientos, pero esto evita que afrontemos las cosas de una manera constructiva. Lo que se recomienda es que las personas traten de sobrellevar estas respuestas emocionales como la tristeza conectándose con personas importantes en su vida y traten de crear nuevas experiencias positivas, para darle otro significado a estas fechas”, comenta el experto.
Según, Brocca en estas fechas es cuando se pone a prueba la paciencia, habilidades sociales y tolerancia de las personas. Así que ante cualquier situación incómoda aconseja evaluar la situación y responder con asertividad. También es importante analizar si responder de manera confrontacional es la mejor forma de afrontar estas preguntas incómodas.
“Cuando vemos que alguien que está afectado en estas fechas tiene mucha ansiedad o tristeza constante, esa situación debe generar una alerta. Eso es importante porque las personas que tienen problemas no necesariamente piden ayuda o aceptan que los tienen”, advierte Brocca.
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