Presta atención a esta información. Las personas que practican algún deporte o realizan actividad física constantemente son propensos a sufrir diversos tipos de lesiones. Muchas de estas son ocasionadas por un mal movimiento o no seguir una buena rutina de calentamiento. Una de las más frecuentes es la rotura muscular que se produce por un estiramiento violento del músculo.
Las espalda y los músculos que se ubican detrás del muslo y la pierna (gemelos) son las zonas más propensas a esta clase de lesión. El tiempo de recuperación depende de la gravedad.
A continuación, para que conozcas más sobre el tema te contamos los síntomas, causas, tipos, tratamiento en casos que no son graves y forma de prevención.
Hay tres tipos de rotura y se diferencian por el grado de daño:
Primer grado
Es leve y la más frecuente, ya que aunque produce dolor en una semana aproximadamente la persona va a poder realizar sus actividades con normalidad.
Segundo grado
En estos casos es común que días después del accidente aparezca un hematoma, ya que se han roto más fibras y en ocasiones arterias pequeñas. En estos casos es común que la persona presente dificultad para mover el músculo.
Tercer grado
Cuando se presente este tipo de rotura, el músculo se ve muy afectado y en algunos casos es necesaria una cirugía. Para recuperar su condición normal, la persona debe descansar entre un mes a mes y medio.
Cuando ocurre la rotura se recomienda aplicar una compresa fría o hielo de 10 a 15 minutos. Luego vendar la zona afectada para hacer presión y descansar para que el músculo pueda recuperarse.
Si la persona cree que la rotura es de segundo o tercer grado lo ideal es acudir con un médico, ya que puede necesitar un tratamiento más especializado que incluya terapias.
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