En momentos en que los grandes equipos de fútbol están siendo financiados por jeques árabes o corporaciones chinas, el éxito que ha tenido la Napoli en la Serie A se destaca, pues se logró con el método tradicional.
La escuadra italiana se formó con astutas decisiones financieras - sin exageradas sumas de dinero - lo que le ha permitido consolidarse con la práctica año tras año.
El equipo es casi el mismo del de la temporada pasada, y su núcleo no ha variado desde que Rafa Benítez fue su técnico entre 2013-15.
Sin embargo, el Napoli parece mejorado comparado con el año pasado, e integrantes como Dries Mertens, Lorenzo Insigne y el capitán Marek Hamsik - quien lleva 11 temporadas con el club - han guiado al equipo al mejor inicio de su historia con nueve victorias en 10 encuentros.
Con más de la cuarta parte de la temporada recorrida, el Napoli lleva una ventaja de dos puntos sobre Inter y está tres puntos por encima de la Juventus.
"Estamos cosechando los frutos de un plan a largo plazo que comenzó durante los dos años de Benítez y continuó con excelentes resultados bajo (el técnico actual, Maurizio) Sarri", dijo el presidente del club, Aurelio De Laurentiis.
De Laurentiis fue criticado antes de la temporada porque el equipo invirtió menos de 50 millones de euros (60 millones de dólares) en nuevos jugadores, comparado con más de 200 millones de euros (más de 250 millones de dólares) desembolsados por el AC Milan, que fue adquirido por un consorcio chino en abril.
El PSG y sus propietarios de Catar, recientemente gastaron una cifra sin precedentes de 222 millones de euros (260 millones de dólares) para adquirir un solo jugador: Neymar.
Manchester City, financiado por empresarios de Abu Dabi, ha gastado casi 500 millones de dólares desde que Pep Guardiola fue contratado como técnico el año pasado.
Las únicas adquisiciones del Napoli fueron el volante ofensivo Adam Ounas de Burdeos, el defensa Mario Rui de Empoli y el delantero Roberto Inglese de Chievo Verona - cada uno por la suma relativamente modesta de unos 10 millones de euros (12 millones de dólares) - e Inglese permaneció en préstamo con el Chievo.
Ninguno de los nuevos ni los de la reserva fueron vendidos, pese a cuantiosas ofertas por el centro-defensa Kalidou Koulibaly y otros.
En lugar de ello, Napoli invirtió su dinero en prorrogarles los contratos a Mertens (cuatro años con una nueva compensación de 4,5 millones de euros) e Insigne (cinco años por 5 millones de euros).
"Este podría ser nuestro año”, dijo Insigne al diario italiano La Repubblica. "Es por eso que ninguno de nosotros consideró otras ofertas”.
Las prórrogas de esos contratos, de los dos jugadores más talentosos del plantel, enviaron una señal necesaria luego que el delantero Gonzalo Higuain fue vendido a la Juventus por un récord en Italia de 90 millones de euros (99 millones de dólares en ese entonces). AP