Después de demostrar un rendimiento consistente en Sporting Cristal durante la primera mitad del 2023, Jesús Castillo Molina (de 23 años) se trasladó al Gil Vicente de la primera división de Portugal, marcando el inicio de su primera experiencia internacional. Sin embargo, los primeros meses no fueron fáciles para nuestro compatriota, ya que luchó por encontrar regularidad y asegurar un puesto en la volante, una situación que no mejoró hacia este 2024. En este escenario, nacieron interrogantes sobre el futuro del futbolista, incluso su nombre volvió a sonar alrededor del fútbol peruano.
Según pudo conocer Depor, actualmente no existen propuestas de clubes de Perú por Castillo, por lo que su futuro, a la fecha, no incluiría un retorno a la Liga 1. Hay que tener en cuenta que el periodo de transferencias del torneo local aún está activo y se cerrará el sábado 31 de agosto.
Por otro lado, surgieron conversaciones con algunos clubes internacionales interesados en Castillo, aunque aún no se ha concretado nada. En cuanto al mercado europeo, la ventana de fichajes, que abrió el 1 de julio, permanecerá hasta el 31 de agosto. Por lo tanto, cualquier posible movimiento del mediocampista tendrá que realizarse dentro de este período, de continuar en el ‘Viejo Continente’.
La campaña de Castillo con el Gil Vicente no fue la esperada. Su último compromiso con el cuadro portugués fue el 6 de abril contra Rio Ave, donde solo jugó 19 minutos en una victoria de 3-0. En esta campaña participó en 13 duelos, entre la liga y dos copas nacionales, acumulando 363 minutos.
Según Transfermarkt, el futbolista tiene contrato hasta junio de 2027. Además, Gil Vicente anunció la incorporación del centrocampista Santi García, procedente del Getafe B de la segunda división del fútbol español, lo que genera más competencia para el peruano.
En el esquema táctico del entrenador Vitor Campelos, Jesús Castillo desempeña el rol de centrocampista defensivo, lo que actualmente se llama pivote. Su función principal consiste en brindar equilibrio defensivo al equipo y desempeñar un papel fundamental en la fase inicial de la construcción del juego. Este cambio de posición es notable en comparación con su rol anterior en el fútbol peruano, cuando jugaba en Sporting Cristal.
Es importante recordar que en su etapa como canterano del club ‘celeste’, Castillo solía desempeñarse como volante interior por derecha. Por lo tanto, su mapa de calor en su último campeonato con los rimenses muestra una marcada concentración de actividad en esa banda, tanto antes de cruzar el mediocampo como en los metros finales del área rival. Sin embargo, en su nueva etapa con el Gil Vicente, se observa una distribución más variada en el campo, ya que ocupa posiciones más defensivas y no se limita a una posición fija.
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