Después de un 0-0 ante Chile que dolió como una derrota, la Selección Peruana tiene la difícil tarea de hacer todo lo posible por puntuar frente a Argentina en La Bombonera. La realidad nos dice que todo está cantado para que la vigente campeona del mundo se lave la cara con el apoyo de su hinchada, luego de su última caída en Asunción a manos de Paraguay. En las Eliminatorias, estamos más cerca de la cola que de soñar con el cupo mundialista; mientras que la ‘Albiceleste’, pese a su presente irregular, lidera la tabla de posiciones y cuenta con un plantel ampliamente superior en todas sus líneas.
¿Hay razones para creer en un halo de esperanza a favor de la ‘Blanquirroja’? ¿Hay motivos para contradecirle a la lógica y soñar con un retorno optimista a Lima? Desde lo futbolístico, el equipo de Jorge Fossati ha mostrado serias falencias colectivas para sostener un resultado cuando todo se pone en contra, y carece de un funcionamiento sólido que le permita crear problemas en campo contrario. Si vemos que enfrente estará Argentina, estas deficiencias se acentúan aún más. ¿De qué podemos cogernos para al menos tener un mínimo espacio para la ilusión?
Este tipo de partidos se juegan con la sangre caliente, con las pulsaciones a mil por hora y un nivel de atención milimétrico. El que falla, lo paga carísimo; y más si vemos que la Selección Peruana juega con la posibilidad de terminar última en las Eliminatorias tras esta fecha doble de noviembre. Por tal motivo, será esencial el regreso de futbolistas como Carlos Zambrano y Pedro Gallese, quienes cumplieron su fecha de sanción frente a Chile. Ahora que ambos ya están disponibles, serán parte de la oncena titular de Jorge Fossati, reforzando el bloque que más trabajo tendrá esta noche en Buenos Aires.
La ausencia del ‘Káiser’ se sintió en el Clásico del Pacífico, por la necesidad de tener un líbero con sus pergaminos en un partido caliente y la forma en la que eso afectó al engranaje defensivo de la ‘Bicolor’. Con Miguel Araujo sin ritmo futbolístico desde el 23 de octubre, la misión de ser el que encabece la línea de tres le quedó muy grande, por las exigencias que eso supone para un defensor y por la rigurosidad que había que tener frente a un rival con las mismas urgencias que nosotros. Ricardo Gareca lo tuvo mapeado y supo usarlo a su favor.
A sus 35 años, Carlos Zambrano es capaz de darnos un rendimiento de altísimo nivel en un contexto tan exigente como las Eliminatorias. El ‘León’ es uno de los futbolistas de mayor jerarquía dentro de la Selección Peruana, y su capacidad para liderar desde la zaga será crucial para organizar una defensa que tambaleó con romperse a manos de Chile, especialmente en términos de marcajes y transiciones. Además, su experiencia enfrentando a figuras de alto nivel será clave al momento de neutralizar parcialmente a jugadores como Lionel Messi, Julián Álvarez o Lautaro Martínez. ¿Esto es sinónimo de que no vamos a sufrir? Pues no, pero el margen se reduce y tenemos que aferrarnos a eso.
Una de las características distintivas de Zambrano es su intensidad en los duelos individuales. Aunque a veces esta agresividad puede ser un arma de doble filo –ya lo vimos hace un mes contra Brasil, donde se dejó llevar y se ganó una tarjeta amarilla tontamente–, en un partido donde la ‘Blanquirroja’ tiene que jugar con mucha concentración y minimizar sus errores, su inteligencia para anticipar y cortar jugadas será vital. Asimismo, viendo cómo Perú sufrió contra Chile en las divididas y los balones aéreos en el área, Carlos puede ayudar a corregir ese déficit.
Eso sí, el regreso de Zambrano no tendrá ningún efecto en la defensa si es que no hay un funcionamiento colectivo detrás. Está claro que Fossati apostará por una propuesta conservadora en Buenos Aires, algo similar a lo que planteó en Brasilia frente a la ‘Canarinha’. Por esa razón, los jugadores deben estar comprometidos con la idea de su entrenador y entregarse a ella sin importar la posición en la que jueguen. Solo así el bloque defensivo tendrá un respaldo desde la coherencia, y poco a poco podremos ir construyendo un resultado positivo a nuestro favor.
Al igual que en la defensa, la portería de la Selección Peruana también tendrá el regreso de Pedro Gallese y en un escenario que le trae muy buenos recuerdos. La última vez que el guardameta nacional pisó La Bombonera en un partido por Eliminatorias, salió airoso con un 0-0 que no se explicaría sin sus monumentales intervenciones. Enfrente estuvo Messi y un combinado argentino que llegaba caminando por la cornisa, necesitado de un triunfo para recomponer su camino rumbo al Mundial de Rusia 2018. Por más que trajeron a Jorge Sampaoli, aquella noche del 10 de octubre de 2017 regresamos a Lima con la maleta llena de ilusión, y los dejamos a ellos con la angustia.
‘Piero’, que llegaba con lo justo después de haber pasado por un largo proceso de recuperación, dejó atrás la fractura en su mano derecha y se hizo grande ante la adversidad. Han pasado más de siete años desde aquel día y ahora el contexto que envuelve a ambas selecciones es muy distinto. Hoy no nos jugamos la clasificación, pues a lo mucho aspiramos con llevarnos un punto para creer en algo que después del último viernes se nos hace difícil de creer. Argentina, que en la reciente Copa América nos ganó sin despeinarse, tiene muchas razones para desquitarse con nosotros y disipar los cuestionamientos de su gente. Ese es el escenario. ¿Será suficiente con un ‘León’ como caudillo y un ‘Pulpo’ inspirado?