Luego de 71 años, el Cometa Diablo tuvo presencia en el cielo en paralelo con el Eclipse Solar Total, ubicándose debajo del Sol y sobre Júpiter, aumentando su visibilidad mientras comienza a caer en la noche. Este fenómeno pudo ser visible desde el hemisferio norte. Ciudades como Mazatlán, Durango, Torreón, Monclova y Piedras Negras, en el norte de México, tuvieron una vista excepcional del evento astronómico, que no volverá a ocurrir hasta el año 2095. El Cometa Diablo, según datos proporcionados por la Sociedad Astronómica Estadounidense, presenta un diámetro estimado de alrededor de 37 kilómetros. Después de esta fecha, a partir del 19 de abril, el cometa se trasladará hacia la constelación de Tauro.