La FIFA abrió un procedimiento disciplinario contra los jugadores suizos Xherdan Shaqiri y Granit Xhaka, en relación con las celebraciones de sus goles en el partido que ganó por 2-1 su selección frente a Serbia el viernes, en el Grupo E del Mundial.
Ambos jugadores, que son de etnia albanesa y herencia kosovar, celebraron con un gesto que pareció imitar al águila bicéfala de la bandera de Albania.
Serbia se niega a reconocer la independencia de su antigua provincia de Kosovo, cuyos 1,8 millones de habitantes son en su mayoría de etnia albanesa.
Los futbolistas negaron que su celebración tuviera tintes políticos. Shaqiri dijo que "no tiene nada que ver con la política, tiene que ver con el fútbol".
Por su parte, Xhaka aseguró que "fue un día realmente especial para mí. Es una victoria para mi familia, para Suiza, Albania, Kosovo. El gesto fue para todos los que me han apoyado; no estaba dirigido a nuestros rivales. Fue un partido muy emotivo".
La FIFA dijo que también abrió un procedimiento contra la federación serbia por disturbios de sus aficionados y la exhibición de mensajes políticos y ofensivos por parte de los aficionados de ese país.
Asimismo, el ente rector del fútbol mundial informó de la apertura de una investigación preliminar contra el entrenador de Serbia, Mladen Krstajic, por "supuestas declaraciones hechas tras el partido".
Reportes de medios señalaron que Krstajic dijo a los periodistas serbios que el árbitro alemán, Felix Brych, que no cobró un penal a favor de su equipo, debería ser juzgado en La Haya, donde tiene su sede el tribunal de la ONU para los crímenes de guerra en la antigua Yugoslavia.
FUENTE: Reuters