Una resistencia heroica de Rusia durante 120 minutos (1-1) y la ruleta de los penales (4-3) condenaron a España, este domingo en los octavos del Mundial Rusia 2018 en un Estadio Luzhniki que finalizó convertido en una fiesta en honor al anfitrión, clasificado a cuartos.
En la tanda decisiva Koke Resurrección e Iago Aspas se toparon con el arquero Igor Akinfeev, convertido en el héroe de Luzhniki; sin embargo, en Brasil 2014 fue todo lo contrario.
El portero tuvo un grosero error ante Corea que lo llenó de criticas tras la Copa del Mundo. El partido terminaría 1-1, pero los asiáticos se pusieron en ventaja luego que Akinfeev les regale, prácticamente el gol cuando el balón se le escapó de las manos.
El fútbol da revanchas e Igor lo sabe. Tapó remates con las manos y con los pies para catapultar a Rusia a los cuartos de final de la Copa del Mundo, imponiéndose el domingo 4-3 en una definición por penales.