Hay pruebas moleculares y pruebas rápidas, dos tipos de test para determinar si una persona contrajo el COVID-19 y, de ser el caso, ser tratado. Pero, ¿cómo haces cuando no es tan urgente ni prioritario, pero es necesario determinar si una persona tiene el virus? Los militares norteamericanos encontraron la ‘solución’.
Una guarnición norteamericana que reside en Daegu, en Corea del Sur, recibe visitantes a diario en un país que cuenta con poco más de 10 mil contagiados y no ha tomado medidas de aislamiento, pero que ha logrado evitar la expansión del virus.
Sin embargo, las prevenciones se mantienen y una de ellas es la bautizada como ‘prueba del vinagre’. Consiste en hacerles oler a los visitantes un pedazo de algodón con un líquido para determinar si identifican el contenido.
Y es que, según explicaron en sus redes sociales, “el principal síntoma para un 30% de los pacientes con casos leves es la pérdida del olfato (o anosmia), según estudios recientes, y el 66% de los pacientes de COVID-19 sufren de anosmia”.
La pérdida de olfato es un síntoma reciente establecido por los científicos en las últimas semanas de estudio del COVID-19. La anosmia se detectó debido a que el 90% de pacientes estudiados en el hospital Hôtel Dieu la presentaron y terminaron dando positivo por coronavirus.
Y ojo. Según especialistas, la pérdida de olfato parece ser un síntoma patognomónico, es decir, que por sí solo permite establecer un diagnóstico para positivo por COVID-19. A tenerlo en cuenta.
Contenido GEC