La entrenadora Lindsay Bull alimentaba a un cocodrilo frente a un grupo de niños cuando el animal la atacó mordiéndole la mano. El incidente ocurrió el domingo pasado en Scales and Tails de Salt Lake City (Utah, Estados Unidos), un local donde tienen reptiles gigantes entrenados.
Según se pueden ver en las imágenes difundidas en redes sociales, el cocodrilo, llamado Darth Gator, atrapó la mano de su cuidadora y la atrapó entre sus mandíbulas. Poco después, Donnie Wiseman, esposo de la mujer, no dudó en lanzarse al tanque de agua y forcejear con el animal para tratar de liberar a la entrenadora.
Luego de varios segundos de tensión, la cuidadora logró salvarse. En conversación con KSL News, Lindsay dijo que el cocodrilo estuvo comportándose de manera agresiva durante el día; sin embargo, como había trabajado muchas veces con él, pensó que podría controlarlo.
La entrenadora agregó que “lo que pasó fue un accidente” y el reptil “no es una máquina de matar”, es un animal que tuvo una mala reacción por un momento. El video, en el que se pueden escuchar los gritos de terror de los presentes, se volvió viral.
Lindsa tuvo que someterse a una cirugía para tratar las heridas en su mano. La cuidadora, quien había entrenado al cocodrilo por más de tres años, asegura que no le tiene miedo y volverá a trabajar con él.
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