Una antigua historia se ha convertido en viral. Se trata del caso de una mujer que decidió compartir con sus amigos de la oficina su emoción de haber ganado 500 dólares de un raspadito de la lotería de Carolina del Sur, pero no imaginó que uno de ellos le robaría el boleto ganador.
El caso ocurrió hace 14 años, en 2012, pero ha vuelto a tener eco en diversos medios de comunicación de varios países, que narran que una mujer de Chester, cuya identidad hasta el día de hoy se mantiene en reserva, reveló que una de las personas con las que trabajaba aprovechó un momento de su ausencia para llevarse tu boleto. La situación le generó decepción y le dio una gran lección. Conoce los detalles en esta nota:
LA HISTORIA DE UN RASPADITO ROBADO EN UNA OFICINA DE CAROLINA DEL SUR Y QUE 14 AÑOS DESPUÉS SE CONVIERTE EN VIRAL
La mujer de Chester compró un raspadito de lotería antes de llegar a su trabajo. En un rato libre decidió raspar el boleto y se dio con la gran sorpresa de que había ganado los 500 dólares. La afortunada ganadora, cuyo nombre no fue revelado, no aguantó la emoción y le contó de inmediato a sus compañeros. Sin embargo, la alegría no le duró mucho, reveló al Canal 9, que publicó la nota en julio de 2012 y que hoy ha resurgido de manera viral.
La mujer recibió una llamada telefónica en el trabajo y dejó el boleto ganador por un momento en su escritorio, pero al regresar ya no estaba. “Lo buscamos y buscamos y no pudimos encontrarlo”, dijo la entonces ganadora, que además no había firmado el ticket en el reverso como medida de seguridad.
Lo bueno es que atinó a llamar a la lotería alertando el robo de su boleto. “Afortunadamente, llamé a la lotería para que pudieran detenerlo”, reveló.
Al día siguiente, una pareja acudió a Bob’s Food Mart en Richburg, donde fue comprado el boleto, para reclamar las ganancias de ese raspadito, pero no pudo cobrarlo porque el ticket había sido reportado como robado. Al ser interrogados, el hombre y la mujer se mostraron sorprendidos y dijeron que un amigo les había pedido el favor de cobrarlo porque se le había averiado el auto.
Ambos indicaron que el boleto fue entregado por Willie Jones, un compañero de trabajo de la ganadora. El hombre, en ese entonces de 28 años, fue acusado de fraude de lotería y para recobrar su libertad tuvo que pagar una fianza de 5,000 mil dólares. Además, es seguro que haya perdido el empleo.
En tanto, sobre la pareja, la Policía indicó que no tenían idea de que la tarjeta rasca y gana fue robada y no enfrentaron cargos.
¿La mujer cobró el premio?
La víctima defraudada, que no muestra el rostro en el canal de televisión donde hizo la denuncia, dijo que la experiencia le enseñó una valiosa lección sobre cómo actuar si vuelve a ganar en un juego de azar. “No mostraré mi billete a nadie. Voy a cobrarlo allí mismo, en lugar de intentar guardarlo”, dijo hace 12 años. La comisión de lotería, finalmente, le concedió a la mujer sus ganancias y el incidente quedó superado.