Una preparación cuyo resultado es un pollo lleno de sabor y una alternativa saludable para el almuerzo. Sirve el pollo al romero con arroz blanco o acompaña con verduras al vapor de temporada u otro alimento de tu preferencia. Esta receta es muy sencilla y rápida de hacer e ideal para el fin de semana.
Ingredientes
- 2 pechugas de pollo, sin piel ni hueso
- 2 dientes de ajo, picados
- 2 cucharadas de romero seco
- 1 cucharada de jugo de limón
- Sal y pimienta al gusto
Preparación
- Precalienta el horno a 190° centígrados (375° F).
- Cubre el pollo con el ajo, agrega el romero, jugo de limón, sal y pimienta. Coloca en un refractario y hornea durante 25 minutos hasta que los jugos de la pechuga salgan claros (el tiempo de cocción dependerá del grosor de la pechuga).
TRUCOS DE COCINA QUE TE AYUDARÁN A AHORRAR
Muchas veces ahorrar es mucho más fácil de lo que creemos. La clave es comprar bien y barato, planificar lo que se hará en la cocina y no desechar nada. Recurrir a alimentos económicos y sanos como las verduras y preparar en cantidad, siempre pensando en nuestro presupuesto de guerra.
Al final casi todo se resume en cocinar más y comprar menos productos elaborados. Pero para quienes prefieran una guía un poco más minuciosa, hemos preparado algunos consejos bien sencillos de empezar a aplicar ya mismo. Apunta estos trucos y aplícalos la próxima vez que vayas al mercado.
Evita las verduras ya cortadas
Ser un poco perezoso en la cocina suele salir caro, así que a la hora de ahorrar lo primero es tener un cuchillo y demostrarte a ti mismo que eres capaz de cortar esa cebolla o zanahoria. No te harás millonario, pero si practicas mucho eso del corte puede que te ahorres algunos centavos para un gustito.
Nada de desechar verduras y frutas: cremas y batidos
Aquí no se desperdicia nada, como diría la abuela, y más si queremos ahorrar. Las frutas y verduras que estén un poco marchitas pueden tener una segunda vida en forma de sustanciosas cremas y refrescantes batidos. ¿Un plátano mustio? A la batidora con un yogur y tenemos un delicioso batido.
Haz caldos
No sólo como ingrediente para otras preparaciones, sino para improvisar una sopa salvadora. Comprarlo hecho no siempre es buena idea. Pon un día la olla y preparar unos litros de caldo para, de paso, aprovechar algunas de esas verduras que ya no están para aguantar más tiempo.
Busca productos de temporada
El sentido común es básico a la hora de hacer las compras y pensar en el menú de la semana o el mes. Si somos de ir al mercado será fácil saber qué está de temporada porque será lo más económico. A partir de ahí, sólo hay que pensar qué cocinar con eso que hemos comprado a buen precio en el supermercado.