Chapecoense: miembro de la tragedia ahora es directivo y rearmará así al plantel

Primero fue la contratación del nuevo entrenador, Vagner Mancini. Ahora, la dirigencia del Chapecoense busca sus primeros refuerzos con el objetivo de contar con una plantilla competitiva de cara al 2017, año en el que, por primera vez, disputarán la Copa Libertadores.

Nivaldo, llegó al 'Chapeco' en el 2006 y, tras la tragedia que sufrió el plantel brasilero donde fallecieron 71 personas, entre ellos 19 jugadores, decidió adelantar su retiro. Ahora, es dirigente del club brasileño que jugará la próxima edición de la Copa Libertadores.

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"Voy a seguir ayudando al club, lejos de las cuatro líneas. No había manera de no aceptar la propuesta", indicó el ex arquero del Chapecoense en un primer momento que trabajará junto a Juan Carlos Maringá, director de fútbol, y Rui Costa, el director ejecutivo del departamento, para buscar a nuevos jugadores.

"Cualquier jugador que llegue tendrá una conversación conmigo. Voy a explicar lo que es y lo que significa el Chapecoense", señaló. "Quiero refuerzos que honren al Chapecoense. He seguido todo el crecimiento, sé lo que he pasado aquí, el trabajo, y por lo que estoy pasando yo hoy", explicó.

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Nivaldo agradeció el hecho que diversos clubes hayan ofrecido a sus jugadores, sobre todo, ahora que tendrán que disputar de manera simultánea el campeonato más importante a nivel de América del Sur y el torneo local, "Todo esto se definirá la semana próxima. Tenemos un perfil del club, de todos los que trabajan aquí, que nunca es cometer una locura", comentó en relación a futuras contrataciones.

"Parece que no es cierto lo que sucedió, pero tenemos que hacer que las cosas sucedan. Vamos a ganar. No nos olvidaremos de ellos", culminó Nivaldo quien jugó 298 partidos para el Chapecoense. Como se recordará, el chárter que transportaba a jugadores, periodistas e invitados del club brasileño para disputar el partido de ida de la final de la Copa Sudamericana contra Atlético Nacional, se estrelló en Antioquía, a cinco minutos del aeropuerto, por falta de gasolina. Fallecieron 71 personas y 6 sobrevivieron.

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