La viveza es, en ocasiones, característica de los mejores defensas del mundo. Uno de ellos es el español Gerard Piqué, quien este miércoles fue titular en el partido entre Barcelona y Olympiacos griego en Camp Nou por la fecha 3 del Grupo D de la Champions League.
Sin embargo, lejos de tener una buena actuación, el central terminó decepcionando en el primer tiempo. Y es que fue expulsado por una infantil mano; todo por querer anotar el segundo tanto del 'Barza'.
La acción se dio a los 42'. Gerard Deulofeu se proyectó derecha y sacó un centro que encontró solo a Piqué. Este buscó sorprender y con un brazo meter gol, aunque el árbitro lo vio todo: no le quedó otra que expulsarlo y dejar al Barcelona con diez hombres.
El encuentro, en los primeros 45 minutos, terminaría con ventaja para los dirigidos por Ernesto Valverde. Un gol en propia puerta de Dimitrios Nikolaou hizo que los azulgranas se vayan a las duchas con el 1-0 a favor.