Sin duda, el Real Madrid ha estado persiguiendo a Kylian Mbappé durante varios años. Hubo un momento en 2022 en el que estuvieron muy cerca de ficharlo, pero no se pudo concretar debido a que el jugador renovó su contrato con el París Saint-Germain hasta junio de 2024. Sin embargo, el tiempo ha pasado y el PSG no ha logrado convencer a Mbappé para que extienda su contrato. A partir del 1 de enero, estará en libertad de unirse al club de su elección. Es evidente que el cuadro madridista es el principal interesado en el deportista, pero según informan los medios franceses, enfrentarían serios desafíos económicos para construir un proyecto a largo plazo con el talentoso jugador.
La saga de Kylian está a punto de comenzar de nuevo. ¿Qué desenlace tendrá? Nadie puede preverlo en este momento, aunque hay dos certezas. En primer lugar, está claro que no jugará en París la próxima temporada. Lo segundo es que los blancos de la capital española harán un nuevo esfuerzo por lograr su fichaje. No obstante, aún es prematuro determinar cuál será su próximo equipo.
Algunos periodistas españoles sugieren que el club ibérico podría planear movimientos significativos en este asunto en enero, cuando Mbappé tenga la libertad de negociar con el equipo de su preferencia. Sin embargo, adquirir al astro de la selección francesa requerirá una inversión económica de gran envergadura por parte de los del Santiago Bernabéu..
“Kylian Mbappé le cuesta a su empresario unos 250 millones de euros al año”, afirmó el especialista y columnista en temas económicos del sector deportivo de Francia, Gilles Favard al medio Le Carré. Entre el costo de la operación, los incentivos, el salario y otros gastos asociados, la factura podría aumentar considerablemente para el equipo merengue.
¿Está en condiciones de afrontar este gasto? Según Favard, no hay certeza al respecto. Para el mencionado, Solo el PSG y el Manchester City tienen la capacidad financiera para desembolsar una cantidad tan considerable de dinero para fortalecer un proyecto a largo plazo, sin que esto afecte las finanzas del equipo.
“Así que sólo hay dos clubes que pueden permitirse sus servicios, el Manchester City y el PSG. El Real Madrid tiene mil millones de pérdidas de balón. No puede invertir ni un cuarto en un solo jugador. Sobre todo porque los demás, cuando sepan cuánto gana Mbappé, querrán que les aumenten“, agregó.
Desde el Santiago Bernabéu, es probable que ya estén explorando alternativas para convencer a Mbappé y asegurarse de que su incorporación no ponga en riesgo la estabilidad financiera del club. Esto es especialmente importante dado que tendrán que competir con otros gigantes económicos como el Manchester City, el Chelsea y el Liverpool, quienes también tienen la mira al prodigio del Bondy.
En el verano de 2017, el Paris Saint-Germain mostró un gran interés en Mbappé y se embarcó en negociaciones con el AS Mónaco para ficharlo. Respaldado por la inversión del fondo soberano de Qatar, tenía la capacidad financiera para realizar una transferencia de gran envergadura. Después de varias semanas de negociaciones, llegó a un acuerdo con el cuadro rojiblanco por ‘Donatello’.
El acuerdo de transferencia se estableció en forma de cesión con una opción de compra obligatoria. El PSG pagó una cantidad significativa como préstamo y se comprometió a pagar una tarifa adicional al final de la temporada. Según los informes, el acuerdo total ascendió a más de 180 millones de euros, lo que convirtió a Mbappé en uno de los jugadores más caros de la historia.
El galo se unió al PSG en calidad de cedido para la temporada 2017-2018 y rápidamente se convirtió en una de las figuras clave del equipo. Su habilidad, velocidad y capacidad goleadora lo convirtieron en un elemento crucial para el PSG en la lucha por el título de la Ligue 1 y en la Champions League.
Real Madrid estuvo a un paso de hacerse con los servicios de Mbappé en mayo del año pasado. Tras meses de negociaciones, el presidente Florentino Pérez, aparentemente, convenció de palabra al delantero francés de jugar en el Santiago Bernabéu y solo faltaba poner la firma.
Sin embargo, de buenas a primeras, el prodigio de Bondy dejó de contestar las llamadas que le llegaban desde el paseo de la Castellana y a los días apareció en el Parque de los Príncipes, junto a Nasser Al-Khelaifi, para anunciar al mundo entero su renovación con el Paris Saint-Germain hasta el 30 de junio de 2024.
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