Del más odiado a posible salvador del mundo. Dietmar Hopp, principal inversor del Hoffenheim y “enemigo público número uno” del fútbol alemán, puede alzarse como una de las figuras que busca acabar con la pandemia del coronavirus. El multimillonario es también el principal inversor de la empresa que trabaja en una posible vacuna contra el COVID-19.
Se trata de la empresa bio farmacéutica CureVac, que se especializa en la investigación y el desarrollo de medicamentos y vacunas innovadoras. Tan importante es el trabajo que está llevando a cabo esta empresa financiada por Hopp que hasta el propio Donald Trump está muy interesado en comprarla.
Según informó hoy el New York Times, Hopp aseguró no estar interesado en vender debido a que quiere que la vacuna “no solo ayude a la gente de la región sino también solidariamente a lo largo y ancho del mundo”. En paralelo a esto, la empresa emitió un comunicado por el cual negó rotundamente cualquier tipo de interés en vender, aunque reconoció intentos de otras partes de adquirirla.
Pero, ¿qué tan cierto es que CureVac está cerca de encontrar la cura? Según informó a la agencia de noticias británica antes mencionada Florian von der Muelbe, el jefe de producción y confundador de la compañía, esperan tener una vacuna experimental “para junio o julio” y allí buscar la autorización para empezar las pruebas en humanos.
Dietmar impulsó el cambio en la regla “50+1”, que en Alemania regula las licencias de los clubes profesionales. Debido a ellos, más de la mitad de los clubes pertenece a los socios. Así fue como se convirtió en el foco de los insultos y repudios de todas las hinchadas.
Contenido GEC