"Es el mejor día de mi vida", fue una de las primeras palabras que dijo Lucas Hernández luego de coronarse campeón del Mundial con Francia. Lo del lateral ha sido sorpresivo por todos lados: desde su titularidad por encima de Benjamin Mendy hasta el propio hecho de jugar por Francia cuando en su momento, le abrió todas las puertas a España.
A inicios de año, el jugador del Atlético de Madrid mostró su preferencia por 'La Roja'. "España me lo ha dado todo y si mi nacionalidad está cerca de hacerse estaría encantado. Me considero un español más. Claro, qué te voy a decir, hablo mejor español que francés. Entonces con eso te lo digo todo", dijo en una entrevista concedida a Televisión Española.
Sin embargo, para cuando llegó la fecha FIFA de fines de marzo, Francia se midió ante Colombia y Rusia en amistosos de preparación para la Copa del Mundo, y fue cuando Didier Deschamps lo llamó para el combinado galo.
Entonces todo cambió, pues a Lucas no le quedó más remedio que aceptar la convocatoria, ya que por reglamento FIFA, no iba a poder jugar por España. Y todo cambió totalmente.
Deschamps fue clave en ello, pues no solo lo incluyó en la lista de 23 para el Mundial, sino que para sorpresa de todos, lo incluyó en el once inicial desde el primer hasta el último partido del torneo. Y Hernández, habitual suplente en el Atlético de Madrid, no defraudó. Fue de menos a más y se convirtió en uno de los puntos más altos de la campeona del mundo.