El artillero del FC Barcelona y de la selección uruguaya, Luis Suárez, dijo el viernes en una entrevista radial que el de Rusia 2018 no será su último Mundial y que es difícil que se retire en el club catalán.
"No creo que sea mi último Mundial, cumplí 31 (años) en enero. Todavía queda. Me quiero sacar la espina a nivel personal de cómo me fui del Mundial anterior, en el cual podría haber aportado muchísimo más al grupo", señaló Suárez en declaraciones a la Radio Rincón, de la ciudad de Fray Bentos (oeste) y reproducidas en el sitio del diario El País de Montevideo.
Según 'el Pistolero', hay optimismo pero también humildad en cuanto a las chances de Uruguay en Rusia 2018: "Siempre se piensa en grande, pero primero con el objetivo de pasar de fase que son partidos difíciles. Después sí, son once contra once y el que esté mejor ese día va a ir pasando de fase", afirmó.
El ex del Liverpool (ENG), Ajax (HOL) y Nacional (URU) también tiene confianza sobre su propio papel en la copa junto a la Celeste. "Estoy muy convencido de lo que quiero hacer en el Mundial. Estoy trabajando para llegar de la mejor manera", expresó.
Suárez fue centro de polémica y suspendido en la primera fase del Mundial de Brasil-2014 luego de que en el tercer partido ante Italia (1-0) mordiera al defensa 'azurro' Giorgio Chiellini en una incidencia de campo. Después del Mundial el artillero dejó Liverpool para fichar por el Barcelona.
En su opinión la clave es que "Uruguay llegue con el perfil de siempre: humilde, trabajador, unidos, que nadie se crea mejor que ninguno; eso es importante para nosotros para hacer un buen Mundial".