Historias que nos suenan a bromas de muy mal gusto, pero que lamentablemente, sea por descuido del deportista o su entorno, pueden afectar terriblemente ya sea a un futbolista o a un ciclista. El caso de Paolo Guerrero, hoy suspendido un año por la FIFA por un "resultado analítico adverso", recuerda al 'Caso Contador', de hace siete años, cuando el español dio positivo por comer un pedazo de carne intoxicado.
El 'Caso Contador'
En setiembre del 2010, Alberto Contador dio positivo por clembuterol durante la segunda jornada del Tour de Francia. Se trataba de una sustancia, desde luego, prohibida por la Unión Ciclista Internacional (UCI) y la Agencia Mundial Antidopaje (AMA). La cantidad de clembuterol que encontraron en su cuerpo fue mínima, de apenas 50 picogramos por mililitro, pero aún así el ciclista fue suspendido.
Sanción y absolución
Durante los siguientes meses, Contador fue sometido a ocho pruebas, seis de ellas seguidas, durante el Tour 210 y en enero de 2011 le comunicaron su sanción: fue suspendido por un año.
El ciclista apeló y presentó sus alegaciones al Comité de Competición, que un mes después de sancionarlo absolvió al corredor, pues se determinó que él no ingirió voluntariamente la sustancia prohibida, y siguió compitiendo mientras se resolvía su caso.
El TAS
Sin embargo, la UCI recurrió ante el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) la decisión del comité de competición de la federación española (RFEC) y solicitó que se le imponga una sanción de dos años y una multa equivalente a sus ingresos netos en un año. Incluso, la AMA también recurrió en los mismos términos.
Finalmente, tras muchas citas, en febrero de 2012, el TAS le impuso una sanción de dos años y le desposeyó del título del Tour de Francia ganado en 2010, además de todos sus resultados posteriores.
Los deportistas, las circunstancias y los momentos son distintos, tanto para lo que fue la pesadilla que vivió Alberto Contador, como para lo que se está enfrentando Paolo Guerrero, ambos referentes en sus respectivas materias e ídolos de un país.
Pero nuestro juicio no puede cubrirse con una venda los ojos, porque después de todo, si una prueba arroja positivo, no hay injusticia que valga. Aunque sí esperanza, y a ella se aferra la defensa del 'Depredador', el jugador y el Perú, para que la apelación, o incluso el TAS, le reduzca la sanción y pueda llegar al Mundial Rusia 2018.