El Real Madrid se clasificó este martes para los cuartos de final de la Champions League pese a empatar 1-1 en el campo de un París Saint-Germain, que acabó con diez, en la vuelta de los octavos de final del torneo continental.
El astro portugués Cristiano Ronaldo abrió el marcador con un remate de cabeza (51), antes de que el uruguayo Edinson Cavani igualara al rebotarle un balón en el cuerpo (70), pero a diez minutos del final Casemiro rubricó el 2-1 (80) definitivo.
Estas fueron las alineaciones del Real Madrid vs. PSG
Real Madrid: Navas; Carvajal, Ramos, Varane. Marcelo; Casemiro, Kovacic, Asensio; Lucas, Cristiano y Benzema.
PSG: Areola; Alves, Thiago Silva, Marquinhos, Yuri; Motta, Rabiot, Verratti; Mbappé, Cavani y Di María.
Zidane, el técnico del Real Madrid, tiene ante sí una de sus decisiones más complicadas, el equipo titular que alineará en la vuelta de los octavos de final de la Champions League ante el PSG, con un factor clave, el estado de Luka Modric y Toni Kroos, para decidir el dibujo y la presencia de Gareth Bale.
Es un partido que ningún futbolista quiere perderse y todos quieren comenzar en el terreno de juego, los focos apuntan a Zidane y la decisión que tiene que tomar, con ocho jugadores fijos y tres puestos por decidir para siete candidatos para los madridistas.
Zidane sorprendió en la ida cuando dio el paso de no utilizar a la 'BBC' en una cita decisiva. Fue la primera vez que ocurrió con Benzema, Bale y Cristiano Ronaldo en plenas facultades.
En la última final de la Champions, ante el Juventus, Bale llegó muy justo de forma, recién recuperado de una lesión, y tuvo que aceptar el banquillo en el partido soñado en su casa.
En la ida de los octavos ante el PSG, en el Bernabéu, Zidane hizo un movimiento táctico que le hizo salir vencedor en el tablero ante Unai Emery. Reforzó su centro del campo con la apuesta por Isco Alarcón y mandó al banquillo a Bale. El Real Madrid pasó a jugar con un 4-4-2, con rombo en el centro del campo y un sistema de ayudas clave a los laterales.
La ausencia de Dani Carvajal por sanción en el derecho provocó ayudas continuas a Nacho en su marcaje de Neymar. Casemiro e Isco estuvieron siempre al quite. Marcelo, frente a Mbappé, contó con la ayuda de Kroos. El Real Madrid ganó en equilibrio, se defendió mejor y en la segunda mitad, al contraataque, asestó un buen golpe a la eliminatoria con el 3-1.
Son aspectos que maneja para París Zidane, que está más cerca de mantener cuatro centrocampistas que de volver al 4-3-3, consciente de que la amplitud que puede ganar en las bandas con la presencia de Lucas Vázquez y Bale o Asensio, debe ir acompañada de un repliegue continuo con desgaste defensivo.
‘Zizou’ no es amigo de arriesgar con el estado de ninguno de sus jugadores y debe decidir en torno a Kroos y Modric. De esa decisión dependerá el resto.
Por si no juega ninguno de los dos y mantiene el doble pivote, está preparado Kovacic, con ritmo tras jugar cuatro de los cinco partidos que han separado la ida de la vuelta. Reservado ante el Getafe en clara señal de sus posibilidades, al igual que Lucas Vázquez, es el futbolista que más minutos jugó entre las dos citas.
Con Marcelo recién recuperado, demostrando en los 25 minutos que jugó ante el Getafe que su problema muscular no llegó a rotura por la frescura que mostró, la banda izquierda espera acompañante. Isco pierde opciones, Marco Asensio parecía ganarlas por sus habilidades en las transiciones rápidas y la conducción de balón, pero sentar a Bale en el segundo partido en el que el Real Madrid pone en juego toda la temporada es una decisión que dejaría al delantero galés marcado hasta el final de sus días en el club blanco. Así están las cosas para la ‘Casa Blanca’.