Histórico. Esta es la única palabra que describe—hasta el momento—lo que está realizando Roberto Mosquera con el Jorge Wilstermann. El cuadro boliviano consiguió el segundo tanto del elenco que sueña con llegar a la semifinal de la Copa Libertadores.
Un nuevo centro frontal le permitió al goleador del equipo, Gilbert Álvarez, conseguir el segundo gol para el equipo boliviano. El delantero anotó de cabeza para los de Mosquera.
Fue en el minuto 51 en el que Álvarez aprovechó un preciso servicio de Chavez, con el cual el elenco cochabambino va consiguiendo los goles para ir a Argentina lo más seguros posible.
Con la camiseta blanca de "Dios es fiel", Álvarez celebró alzando las manos al cielo. El delantero sabe que el momento que está viviendo es gracias a la entrega de todos sus compañeros, a quienes abrazó con euforia.