Sampaoli al Sevilla: del Juan Aurich peruano a la mejor liga del mundo

Jorge Luis Sampaoli tiene 56 años y su profesión, de tendencia ascendente, podría estar llegando a la cumbre con su posible contratación por el Sevilla de España, el actual tricampeón de la Europa League, y la puerta para que el entrenador argentino ingrese a la liga más importante del mundo.

Hoy desperté y el titular 'Sampaoli al Sevilla' se me presentaba por todos lados, rápidamente vinieron a mi cabeza esas imágenes de un técnico joven, aparentemente inexperto, que vestía un uniforme ancho con el escudo del Juan Aurich de Chiclayo, que poco a poco fue adquiriendo renombre, y con esfuerzo y trabajo, temporadas más tarde era cargado en hombros chilenos.

Es bien sabido que es un técnico explosivo en el campo y emula el trabajo de Marcelo Bielsa, pero cómo es que nace este personaje de la dirección técnica. Todo se remonta a los años 90, cuando una expulsión, y posteriormente su ingenio, lo llevaron a las principales portadas de los diarios de Casilda, provincia de Santa Fe, Argentina, donde nació 'Don Sampa'.

Jorge Sampaoli fue un futbolista que vio su carrera interrumpida tempranamente, a los 19 años, por una lesión de tibia y peroné. El mismo club que lo acogió en su despedida como jugador le dio la oportunidad para dirigir: el Alumni de Casilda, donde debutó oficialmente a cargo del equipo el año 1994.

Es cierto, era un equipo de una liga regional, pero lo suficientemente eficaz para que alguien adquiera experiencia en la dirección. Sampaoli lo tuvo dos años, y fue en 1995 cuando en un partido de setiembre, apenas con 15 minutos disputados, lo expulsaron por reclamarle airadamente al juez del partido. Un estadio sin tribunas, poca gente, y la necesidad de seguir ofreciendo sus indicaciones al Alumni; el entrenador, que para ese entonces superaba los 35 años, no tuvo mejor idea que subirse a un árbol colindante a la cancha y proseguir con su trabajo.

Sergio Toriggino, un fotógrafo del diario La Capital de Rosario, capturó esa fotografía y la misma dio a parar en el escritorio de Eduardo López, máximo dirigente de Newell's de Rosario, club que administrada al Atlético Argentino de Rosario. La imagen sirvió para observar su coraje y contratarlo. Su breve paso por Belgrano de Arequito no se compararon a su trabajo con el equipo de López, donde trabajó en 1996.

Como cada mañana, uno de los de esos ejemplares de La Capital llega al despacho presidencial de Newell's de Rosario. Allí, Eduardo López, máximo dirigente del club desde hace un año, desayuna mientras hojea el diario. Cuando encuentra el suplemento deportivo, se enamora de la foto. Del hombre del árbol; del técnico del Alumni; de Sampaoli. La decisión está tomada: contratará a ese "personaje".

Fueron 8 temporadas en total, entre 1994 y 2001, alternando por clubes como el Alumni de Casilda, Belgrano de Arequito, Argentino de Rosario y Aprendices Casildenses. La hora de emigrar de su tierra había llegado; próximo destino: Chiclayo, Perú.

Sigo sorprendido, pensar que un 'Sampaoli al Sevilla' fue hace 14 años 'Sampaoli al Aurich', y a qué equipo todavía. Los chiclayanos terminaron el 2001 a un paso de descender y por un tema presupuestal contrataron a un técnico argentino que había mostrado su trabajo solo en una liga regional. El resultado no fue nada bueno, ese mismo año Juan Aurich con problemas económicos, le dijo adiós a Sampaoli y a su estadía en primera. El argentino fue contratado rápidamente por Sport Boys.

Lo más resaltante de su paso por el fútbol peruano fue haberle devuelto nivel al Bolognesi de Tacna con dos clasificaciones consecutivas a la Copa Sudamericana; previo a ello, haber estado al frente de Sport Boys no lo ayudó mucho, hasta se perjudicó personalmente ya que los problemas económicos abundaban en el Callao

¿Cómo quedaron al final del año los equipos de Sampaoli en Perú?

El gran trabajo en Tacna lo colocó como la mejor opción para el Sporting Cristal del 2007, el resultado fue fatal. Esa temporada, los del Rímac, estuvieron cerca del descenso… la hora de volver a migrar había llegado, esta vez hacia el país vecino: Chile.

Fue entre estos dos países donde su carrera se catapultó, iniciando en tierra mapochina y culminando ahí mismo. El O'Higgins lo recibió durante las temporadas 2008 y 2009 y se posicionó tercero y décimo respectivamente, lo suficiente para entender su modalidad de trabajo y la idea de equipo que manejaba. Siguiente destino: Emelec de Ecuador.

Con los ecuatorianos tuvo la 'señora campaña'. Apenas instalado con los 'Eléctricos' de Guayaquil, ganó la primera etapa del torneo y quedó segundo en la siguiente. En los play-offs no pudo superar a la Liga de Quito, pero el honor de lo alcanzado perduró.

Retornó a Chile, pero esta vez con la 'Universidad'. Logró el bicampeonato (2011 y 2012) pero lo más valioso fue la obtención de la Copa Sudamericana 2011. Pareciera que su buen momento coincidió con la partida de Claudio Borghi como director técnico de la Selección de Chile; la primera oportunidad de Sampaoli al frente de un país había llegado.

Trayectoria de Jorge Sampaoli:

Jorge Sampaoli posicionó a la a la Selección de Chile en el tercer puesto de las Clasificatorias al Mundial Brasil 2014, donde el poderío de la 'Roja' se vio desatado cuando en fase grupos vencieron a la vigente campeona del mundo: España. También pudo ganar Australia pero solo cayó ante Holanda. En octavos de final se desprendieron del sueño por un penal mal pateado, Brasil les dijo adiós.

La revancha llegaría al año siguiente cuando los chilenos, de la mano de Sampaoli, conquistaron por primera vez en su historia una Copa América, polémica, por cierto, pero más allá de todo, obtenida con un trabajo obvio ya que la mejoría de los sureños era notoria.

El argentino se ganó el respeto de todo un país, tal vez desde aquí mirábamos con envidia a quien en algún momento llegó a nuestro país como un entrenador pequeño apoyado en malos resultados. ¿Quién lo diría? En el mejor momento de su carrera se marchó de aquella selección porque no toleró la revelación de su contrato, algo que de por sí es privado y parecía sin importancia, pero él lo vio como una falta de respeto.

Sin duda alguna, la hinchada latinoamericana debe estar pendiente con Sampaoli al Sevilla, un entrenador joven que ya no gritará sus indicaciones desde un árbol, sino desde los banquillos más valiosos de toda Europa.

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