se caracteriza por ser el Mundial más tecnológico de la historia, los árbitros han sumado a sus herramientas relojes inteligentes, el VAR, e inclusive sistemas de comunicación confiables e inmediatos con sus compañeros. No obstante, no son los únicos que se apoyan de la tecnología, los seleccionados también dependen de ello.

La Selección de Alemania sabe del caso. Joachim Löw, seleccionador del equipo, comentó: "Los jugadores de ahora son de otra generación, que necesitan una estimulación visual. No son simples receptores de órdenes, quieren ver y volver a ver por ellos mismos las acciones de juego bajo ángulos diferentes. Quieren información, críticas y, sobre todo, soluciones."

Desde el Mundial 2006, sus ayudantes comenzaron a editar montajes en video de cada jugador potencial que podría ser incluido en la selección. Esta misma filosofía se ha volcado en Rusia 2018, pero con tecnologías mucho más avanzadas.

En opinión del técnico, las posibilidades de la informática y el uso de ellas suponen "del 5 al 10% para el éxito del equipo". Por supuesto, él mismo se ha declarado seguidor de su intuición para elegir sus alineaciones, no se dejará influir por los datos para su decisión final, pero los jugadores siempre estarán apoyados de la tecnología durante su campaña por el .

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