En la constante búsqueda del bienestar y una mayor esperanza de vida, la ciencia ha encontrado respuestas y proyecciones en los posbióticos, también conocidos como metabolitos. Estas sustancias, producidas durante la digestión y otros procesos químicos del organismo, ayudan a regular los procesos corporales y a mejorar la microcirculación, abriendo nuevas posibilidades para mejorar la calidad de vida y el control de la salud.
De acuerdo con recientes investigaciones llevadas a cabo en Japón por el movimiento de longevidad Sanki Global, se ha descubierto un nuevo enfoque para aprovechar el poder de los posbióticos a través de la ingeniería inversa. Este procedimiento implica la meticulosa selección y reproducción de bacterias que forman el microbioma de personas longevas y saludables. Las cepas seleccionadas se cultivan en instalaciones especializadas y en condiciones estrictas para garantizar su desarrollo.
Parte de estos cultivos, utilizados como sustratos para la producción de posbióticos, se recolectan en su punto máximo de desarrollo, asegurando la cantidad adecuada de sustancias biológicamente activas. Los posbióticos se sintetizan y extraen mediante un sistema de fermentación único operado en instalaciones especializadas, donde luego el producto se transforma en su estado final y se prepara para ser consumido como complemento de la alimentación diaria.
Desde la perspectiva de la investigación y el desarrollo de productos, Sanki ha estado trabajando en los posbióticos para convertirlos en herramientas poderosas con el objetivo de mejorar la calidad de vida y promover un envejecimiento saludable y activo. “Los postbióticos están revolucionando la percepción y el enfoque de la salud. Estamos encantados de encabezar este movimiento de bienestar proporcionando productos que utilizan eficazmente los beneficios de los postbióticos para mejorar la longevidad de las personas”, señaló el Doctor y Científico, Bejit Edeas, Director Científico.
Hoy, los posbióticos emergen como una pieza fundamental en el rompecabezas de la longevidad. Su potencial para influir en la genética, regular la inflamación y proteger las estructuras celulares esenciales los posiciona como candidatos prometedores para el desarrollo de productos dirigidos a mejorar la salud y el bienestar en todas las etapas de la vida.
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