Bryan Ruiz, el capitán de Costa Rica, ha dejado de ser el villano del Sporting, que lo tuvo apartado del equipo hasta mediados del pasado noviembre, para convertirse en uno de los héroes de la Copa de la Liga, que el conjunto lisboeta conquistó la pasada noche tras vencer al Vitória de Setúbal.
Ruiz, apodado "la comadreja" en su país, es uno de los referentes del fútbol costarricense y hasta mediados de noviembre su situación llenó numerosas páginas en los medios lusos aunque, sobre todo, fue tema de debate en Costa Rica.
El presidente de la Federación Costarricense de Fútbol (Fedefutbol), Rodolfo Villalobos, llegó a decir en septiembre que tenían "una preocupación muy grande", ya que el jugador entrenaba solo en el Sporting y no jugaba partidos.
A pesar de su ausencia, Ruiz siguió siendo capitán de Costa Rica, selección que logró el pasado octubre su quinta clasificación para un Mundial, en este caso para el que se disputará en Rusia este año.
El empeño del jugador, que mostró al técnico sportinguista Jorge Jesus su deseo de conquistar títulos con el club portugués provocaría un punto de inflexión que posibilitó que Ruiz volviera a integrarse con la plantilla del primer equipo el 13 de noviembre.
Desde entonces, el extremo zurdo ha participado en Liga en siete de los ocho partidos posibles.
Y en la Copa de la Liga ha sido decisivo, ya que en la semifinal contra el Oporto marcó la última pena máxima y ayer fue titular en la final disputada en Braga que también ganaron los leones tras los penaltis después del empate en el tiempo reglamentario.
Tras unos meses aislado, Bryan Ruiz ha pasado de ser un jugador olvidado a convertirse en uno de los futbolistas con los que cuenta Jorge Jesus para afrontar los retos que del Sporting en la presente temporada, ya que son segundos en Liga y están la Liga Europa tras caer en Champions.
Además, Ruiz tendrá que aprovechar lo que, a priori, será su último Mundial, ya que tiene 32 años.
"Está entre los mejores jugadores que ha tenido el país", ha dicho en más de una ocasión el seleccionador de Costa Rica, Óscar Ramírez.
Óscar Ramírez EFE