El director ejecutivo del campeonato de monoplazas estadounidense IndyCar, en el que participará el español Fernando Alonso durante las 500 Millas de Indianápolis, aseguró este jueves que "no hay duda que es posible" que el asturiano gane la carrera, aunque tendrá que contar con muchos factores.
"Creo que no hay duda que es posible que Alonso gane la carrera, ha habido muchos 'rookies' (debutantes) que han llegado y sorprendido a todos. Alonso está en el máximo nivel de pilotos del mundo y tendrá bastante tiempo para aprender", destacó Mark Miles durante una visita a la sede central de la Agencia EFE, en Madrid.
El ejecutivo del campeonato estadounidense explicó que, no obstante, la emblemática carrera americana que cumple este año su edición número 101, requiere que el piloto tenga varios factores a su favor durante las tres horas que dura la prueba para alzarse con el triunfo final.
"Uno de nuestros pilotos, que compitió en 15 ediciones antes de ganar la carrera, el brasileño Tony Kanaan, dice que esta es una carrera que elige a su campeón. Uno puede ser el mejor y tener el mejor coche, pero aún así puede ser que no gane la carrera", explicó Miles.
"No es como otras carreras que si empiezas desde el primer lugar tienes muchas probabilidades de terminar en el podio. Hay muchos adelantamientos, pasan muchas cosas en 500 millas, que incluso si es el mejor ese día puede ser que no gane. Pero seguro que Alonso tendrá una gran oportunidad", añadió el máximo representante del campeonato IndyCar.
Para la organización de la prueba fue "una gran sorpresa" y algo "muy importante" que el bicampeón mundial de Fórmula Uno español (en 2005 y 2006, con Renault) se decidiera a correr las 500 Millas, por la proyección internacional que da a la prueba más allá de los Estados Unidos.
"Nos da la oportunidad de llegar a aficionados del motor de todo el mundo y explicarles mejor qué es la IndyCar y las 500 Millas de Indianápolis. Y es sensacional, la noticia ha suscitado mucho interés en todo el mundo", aseguró Miles.
El ejecutivo estadounidense, que antes de dirigir la IndyCar estuvo a la cabeza del circuito mundial ATP de tenis masculino, destacó que las 500 Millas son "el mayor evento deportivo anual del mundo", que el año pasado reunió a 350.000 personas durante el día de la carrera, 550.000 durante toda la semana.
"Es increíble ver la atmósfera, tanta gente, en esta gran pista. Coincide con el 'Memorial Day' en Estados Unidos (en el que se conmemora a los caídos del ejército estadounidense) por lo que se podrán ver globos rojos, blancos y azules; los aviones de la aviación volando por encima... Mucho patriotismo, que es muy importante para nosotros, pero creo que para cualquier nacionalidad es muy interesante, porque no hay nada igual", aseguró.
En cuanto a los desafíos que tendrá que enfrentar Fernando Alonso, desde sus primeros test de ayer en el Indianapolis Motor Speedway con su Dallara DW12 Honda, Miles destacó que su principal desafío será pasar de las pruebas en solitario a conducir con tráfico, en una prueba en la que compiten 33 monoplazas.
"Alonso había utilizado los simuladores y en su primer día en el coche ayer estuvo extraordinario. Eso no nos sorprende. Lo siguiente para él es subirse al coche con tráfico, a una gran velocidad, el año pasado la máxima llegó a las 240 millas a la hora (386 kilómetros/hora) y con 33 coches en carrera", explicó.
"Uno de los pilotos de IndyCar dijo recientemente que Alonso adelantará y será adelantado en una carrera más que en toda su trayectoria en la Fórmula Uno. Hay mucha acción en la carrera, tres coches compitiendo en paralelo, a máxima velocidad. Tendrá que aprender eso", añadió el director ejecutivo del campeonato.
La velocidad y el número de coches en pista invita a pensar en una carrera peligrosa, aunque Miles asegura que el riesgo se ha reducido mucho respecto a dos o tres décadas atrás.
"Las carreras son peligrosas, es algo del deporte. La IndyCar es menos peligrosa de los que era 20 o 30 años atrás, los coches han mejorado mucho y la pista también", aseguró Miles, que deseó "lo mejor" a Alonso, que tendrá la experiencia de "un buen equipo", como es el conjunto Andretti.
Si Alonso consigue hacerse con el triunfo, lo celebrará con una bebida poco habitual para los aficionados al motor europeos: una botella de leche, una "tradición" de un evento centenario, según explicó Miles.
"Hace muchas décadas, lo habitual era preguntarle al ganador qué quería beber. La respuesta de uno de ellos (el estadounidense Louis Meyer, en 1936) fue 'buttermilk' (bebida basada en suero de mantequilla). Y se quedó, la leche se convirtió en una tradición, se convirtió en parte de la marca y la experiencia de las 500 Millas de Indianápolis", finalizó el director ejecutivo del campeonato IndyCar.
(EFE)