LeBron James, estrella de Los Ángeles Lakers, no sufrió daño estructural en la ingle izquierda tras someterse a una resonancia magnética. Sin embargo, no jugará el próximo partido de la NBA, ante Sacramento Kings.
Según los Lakers, los doctores determinaron que James descanse y sea observado diariamente para ver como evoluciona la lesión que se produjo la pasada noche durante el partido que disputaron y ganaron de visitantes 127-101 ante los Warriors de Golden State.
La sensación inicial en el vestuario de los Lakers fue positiva y optimista después de que James sufriera la lesión durante el tercer cuarto del partido ante los actuales campeones de liga, Golden State Warriors.
Como el propio James había adelantado, los resultados de la resonancia magnética mostraron que el músculo está intacto, sin ningún tipo de daño.
James dijo que sufrió la lesión cuando "sobreextendió" su ingle después de que su pierna derecha resbalara mientras el ala-pívot Draymond Green le trataba de quitar un balón.
Tras concluir el partido, en el que antes de abandonar el campo logró un doble-doble de 17 puntos, 13 rebotes y cinco asistencias, James dijo que las lesiones no era algo que le preocupaban.
"He podido salir del campo por mis propios medios y estoy seguro que no va a ser nada grave", comentó James. "Traté de recuperarme, pero no mejoró la molestia y por eso me retiré".
La baja de LeBron James para el partido del jueves frente a Sacramento Kings le corta una racha de 116 consecutivos que ha disputado en la temporada regular y de 156 combinados con los de los playoffs.
El ala-pívot Kyle Kuzma y el alero Brandon Ingram serán los jugadores, junto con el veterano base Rajon Rondo, que lideren a los Lakers durante la ausencia de James, que en lo que va de temporada, su primera con los Lakers, tiene promedios de 27,3 puntos; 8,3 rebotes y 7,1 asistencias.
FUENTE: EFE