Los grandes sucesos de la historia no siempre y no necesariamente ocurren en magnos eventos o necesitan de un ambiente especial. Las circunstancias del día a día a veces son suficientes para cambiar el rumbo de una persona o de una entidad, como ocurrió con Lionel Messi y el Barcelona hace casi ya 18 años, cuando se firmó en una servilleta el primer 'contrato' del jugador que revolucionaría la historia del cuadro azulgrana y, claro está, también del fútbol moderno.
Con apenas 13 años de edad, Messi llegó junto a su familia a pasar las pruebas en el Barcelona. Deslumbró a todo mundo y retornó a Rosario, Argentina (su ciudad natal), con la promesa de que el club culé le ficharía. Sin embargo, el gran problema para muchos en la Ciudad Condal era la estatura de Leo, que apenas llegaba al metro cuarenta de estatura y necesitaba un tratamiento hormonal muy costoso para crecer.
A Joan Gaspart, presidente del Barza por aquel entonces, le parecía una apuesta muy arriesgada, más tratándose de un niño.
Ahí fue cuando apareció la figura de Horacio Gaggioli, quien fue uno de los que llevó a Leo a España. El también rosarino 'amenazó' al club catalán con ofrecer a Messi a otros equipos. Entre ellos el Real Madrid.
Los días avanzaban y no había respuesta del club. Hasta que un 14 de diciembre, Gaggioli quedó en reunirse con el por entonces Secretario Técnico del Barça, Carles Rexach, para jugar al tenis. Tras el partido y ya en la cafetería, Gaggioli se jugó el todo por el todo.
Él y Josep Maria Minguella, agente de jugadores que había llevado a varios futbolistas al Barcelona, presionaron a Rexach para que fiche a Lionel Messi. Casi a regañadientes, el directivo azulgrana tomó una servilleta y elaboró el primer 'contrato' de la 'Pulga'.
En Barcelona, a 14 de diciembre del 2000 y en presencia de los Sres. Minguella y Horacio Carlos Rexach Secretario Técnico del F.C.B. se compromete bajo su responsabilidad y a pesar de algunas opiniones en contra a fichar al jugador Lionel Messi siempre y cuando nos mantengamos en las cantidades acordadas.
La servilleta fue firmada por los tres. Y una semana después, el propio Gaggioli y Rexach dieron validez oficial a ese documento ante un notario y Messi junto a su familia puso rumbo a Barcelona, para empezar la gran aventura que ya el mundo conoce.
¿Y dónde quedó aquella servilleta?
Tal y como lo ha informado el medio 'Infobae', aquel valioso documento está en manos de Horacio Gaggioli, quien tiene esa servilleta guardada en una caja fuerte del banco Crèdit Andorrà. Aunque para él, debería estar en el Museo del Barcelona.
"Creo que debería estar allí, en un lugar preferencial junto a los Balones de Oro de Messi, ya que ese papelito es el que le cambió la historia contemporánea al club", señaló Gaggioli a 'Infobae'.