El partido del Barcelona ante Las Palmas fue parco, sin vida, a pesar de haber vencido por 3-0. Es que la gente en los estadios le da color al fútbol que, a final de cuentas, es un espectáculo. La política—que muchas veces funciona paralelamente—atacó al deporte rey afectando a muchas de las partes de uno de los clubes más representativos del mundo, demostrado en el Camp Nou. El cotejo se jugó a puertas cerradas.
¿Qué está pasando en Barcelona?
Barcelona pertenece a la comunidad autónoma de Cataluña, que sigue siendo hasta el momento parte de la España que conocemos. Esta ciudad, muy aparte de su gran atractivo turístico y de ser la segunda ciudad más habitada del país, posee a uno de los mejores clubes deportivos del mundo: FC Barcelona.
Cataluña quiere ser una 'nación'. El sentimiento independentista ha existido desde hace muchos años, pero la poca capacidad de negociación por parte del Gobierno Central de España, sumado al nuevo gobierno catalán le ha dado vía libre al referéndum.
¿Qué aducen los catalanes?
Muy simple. Cataluña siente que sus recursos, al ser una de las ciudades que más ingresos le genera a España, sirven para ayudar a los sectores más pobres de España, con quienes ni siquiera comparten la lengua. Cierta parte de la provincia piensa que todos sus ciudadanos estarían mucho mejor lejos de la jurisdicción española.
Depor se comunicó con el analista internacional Ramiro Escobar, quien dio su opinión sobre el tema y afirmó que ambas partes perderían con la independencia de Cataluña. Por un lado, España se quedaría sin una de las regiones más atractivas económica, social y culturalmente hablando, mientras que los independentistas perderían varios privilegios al no tener posibilidades de integrar la Unión Europea.
Es ilegal
Para el Gobierno de España es ilegal el referéndum de Cataluña, ya que ninguna comunidad, por más autónoma que sea, puede llamar a un acto de este nivel, ya que viola la Constitución de 1978, la cual establece que el país español es indivisible. En caso el SÍ triunfe (corriente independentista) los altos cargos podrían remover a las gobernadores catalanes y hacerse cargo de Cataluña mientras todo se ordena.
Barcelona lo sufre
El Barcelona sufrió hoy los rezagos del choque político entre Cataluña y España. El partido ante Las Palmas se jugó a puertas cerradas debido a los actos de represión del Gobierno Central en el día de las votaciones. No dejaron votar a varios ciudadanos y el cuadro de la ciudad pidió que no se jugara el cotejo, pero La Liga no accedió amenazándolos con quitarles los puntos ante Las Palmas.
Hubo opiniones divididas. Algunos jugadores como Piqué no querían jugarlo, así como Vilarubí y Monés, directivos del Barcelona que dimitieron luego de que se jugase el cotejo ante Las Palmas, en clara protesta a la decisión de Bartomeu de disputarlo, luego de recibida la amenaza.
Si es que Cataluña se independiza y recibe el respaldo de España—situación muy difícil, por lo que la ciudad catalana recurriría a un ente internacional—el Barcelona debería abandonar la Liga Santander, y se vería obligado a jugar la liga de Cataluña, la cual tiene un nivel muchísimo más bajo. Se perderían varios auspiciadores y el club no podría solventar los gastos en su plantilla, por lo que dejarían ir a varios de sus jugadores.