Sin duda alguna, para muchos, el hecho de ver a la en un Mundial será una de las experiencias más gratas en su vida. El ganarle a significó nuestro boleto a y el acabar con una racha que nos acechaba por 35 años. 

Muy aparte de quienes estuvieron a cargo de la cobertura en el Estadio Nacional, el resto de la familia que integra al Diario Depor vivió una experiencia inédita en la redacción. Tocó ver el encuentro por televisión de manera paralela al trabajo que les correspondía hacer... ¿se imaginan lo difícil que es mantener la concentración mientras el equipo de tus amores se juega la vida?

Las reacciones de nuestros redactores lo dicen todo. Euforia,  nerviosismo, alegría, desenfreno, ansiedad, y miles de sensaciones más: todo en menos de 90 minutos. Situación que posiblemente muchos peruanos vivieron en el estadio, en sus casas o centros de labores. No existe razón para creer que el fútbol es solo un deporte.

Ya con la certeza de que Perú estaba en Rusia 2018, las lágrimas se apoderaron de algunos, pero no quedaba de otra que volver a nuestras funciones. Porque mientras un gran sector tenía carta libre para celebrar la clasificación (merecida de por sí), los hombres de prensa no pueden parar ya que tenemos un público que estará hambriento de información.

Ahora a Perú le toca escribir un nuevo libro, pero para ello faltan algunos meses. Nosotros, como trabajo del día a día, no podemos dejar de admitir que existe un gran hinchaje por la Selección Peruana, y debajo de cada una de nuestras pieles, existe un corazón teñido de rojo y blanco. ¡¡¡Arriba, Perú!!!

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