De 'chibolos', todos hemos soñado con este ritual: salir por el túnel con la camiseta de tu país, ponerte en fila, cantar el himno inflando el pecho y dejar la vida en la cancha. Son muy pocos los que llegan, y los que no nos hicimos futbolistas, terminamos por aceptarlo. Pero darle a la pelota, destacar y no llegar... ahí está el verdadero dolor.
Lesiones como la de Radamel Falcao (2014) o un bajón en el rendimiento como el de Ronaldinho (2010) son las razones más comunes. Pero que un balazo ponga fin a tu carrera -Salvador Cabañas, en 2010- es una pena muy difícil de asimilar y comprender.
Motivos estéticos, astrológicos y otros, polémicos y ridículos, acabaron con una de las iliones más grandes de cualquier persona.
Incluso en la actualidad, y a poco de que inicie una nueva justa mundialista en Rusia, hay figuras que no tienen su boleto totalmente listo, como es el caso de Paolo Guerrero en la Selección Peruana, quien está a la espera de la audiencia en el Tribunal Arbitral del Deporte.
¿Llegarán a Rusia?
Pero Paolo no es el único que 'cruza los dedos' para estar presente en la Copa del Mundo, en Argentina, por ejemplo, aunque por distintas razones, Paulo Dybala y Darío Benedetto, luchan por llegar a la máxima fiesta del fútbol.
El caso de la 'Joya' se debe exclusivamente a una decisión de Jorge Sampaoli. El técnico de la 'Albiceleste' explicó que el jugador de la Juventus "no se adapta a la idea de juego". ¿En dos meses y medio demostrará lo contrario?
Mientras que el 'Pipa', quien vivió una gran 2017 en Boca Juniors que lo tuvo, incluso, delante que Higuaín y Agüero, se rompió el ligamento de la rodilla derecha en noviembre. Volvería recién en mayo.