Un domingo 14 de agosto de 1927, la ciudad de Lima se paralizó, quizás por primera vez, por un partido de fútbol. El Real Madrid, que no necesitaba de televisión o internet para que su poderío sea conocido en todo el mundo, pisaba por primera vez un campo del Perú. Once futbolistas de equipos de El Callao, siete del Atlético Chalaco, le hacían frente para conocer su grandeza. Pero las cosas cambiaron el 15.
A falta de hora y media para el partido, 2 de la tarde, ya no había espacio para nadie más, tanto adentro como afuera del estadio. Hasta en los árboles y atrás de los arcos había gente. Tan solo 24 minutos aguantaron los nuestros. Finalmente, Real Madrid goleó con categoría 4-1 y las ilusiones de los porteños para formar parte de la primera Selección Peruana de la historia se desvanecían.
Ocho futbolistas de Alianza Lima alinearon para el seleccionado limeño al día siguiente, desde el arquero hasta el quinteto ofensivo. El partido era en el mismo estadio y a la misma hora, con el plus de que estaba en juego un trofeo donado por el mismísimo Rey de España, Alfonso XIII. Cualquier resultado que no sea un triunfo para los ibéricos sería casi un acto heróico en la recién iniciada historia del fútbol peruano.
El combinado limeño hizo historia al empatar con un gol ante el Real Madrid. Con grandes futbolistas como Manguera Villanueva (quien anotó el gol), Maquilón, Lavalle y el uruguayo Romeo Parravicini, (técnico y jugador a la vez), los capitalinos resistieron los ataques blancos, consiguiendo una igualdad que se denominó como "un prestigio que se recordará por años entre los aficionados". El presidente del Perú, Augusto B. Leguía, estuvo presente en este partido.
La igualdad de la Selección de Lima ante el Real Madrid fue muy celebrada por los hinchas. Así, el fútbol peruano tuvo la primera gran alegría de su historia, generando una esperanza ante el futuro del balompié nacional (que demoró mucho en llegar y pasó muy rápido). Tanta fue la algarabía, que fue la base de la primera Selección Peruana en la historia, para la Copa América 1927. En aquel torneo, Perú ganó uno de tres partidos.
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