El superclásico argentino entre Boca vs River, inédita final de la Copa Libertadores, se jugará un día después de lo previsto si mejoran las condiciones climáticas en Buenos Aires, alargando el suspenso y la ansiedad de millones de fanáticos. En caso tenga que postergarse una vez más, el sábado 17 de noviembre es una fecha tentativa.
En Argentina apuntan que Boca y River proponen jugar una semana después de lo previsto. Sin embargo, los expertos en meteorología anticipan que el sábado 17 de noviembre también habrá tormenta en la capital de Argentina. Y quizá de la misma intensidad que obligó a suspender el partido en La Bombonera.
Para este domingo está prevista una reunión de autoridades de la Conmebol y de ambos clubes este a las 11H00 locales (09H00 de Perú) donde se decidirá si se confirma la disputa del partido a las 16H00 locales (14H00 Perú), teniendo en cuenta que el pronóstico metereológico prevé que siga lloviendo hasta el martes.
"Dependerá del tiempo. Si esta noche o mañana hay otro diluvio, el campo no va a aguantar. Si llueve pero no con mucha intensidad, el campo va a drenar bien", dijo el presidente de Boca y anfitrión, Daniel Angelici, una vez decidida la suspensión.
Boca y River son los dos clubes más populares de Argentina y representan juntos a un 70% de los hinchas en un país con 44 millones de habitantes donde se respira fútbol. Jamás se midieron en una final por la Copa Libertadores que es obsesión de sus simpatizantes.