Sin ninguna duda, Neymar es uno de los mejores jugadores del mundo. Tiene un drible fantástico, velocidad arrolladora y una magia en los pies que le otorga al fútbol más diversión. Mas no solo en el deporte rey nos regala sorpresas, también lo hace con sus constantes cambios de look.
A los 17 años, cuando debutaba en el Santos, Neymar tenía el pelo corto. Poco a poco fue dejándose la cresta que lo caracterizó por tanto tiempo en el Santos.
Luego, cuando empezó a disputar partidos con la selección brasileña, la cresta creció y empezó a tapar la frente. Neymar no tuvo mejor idea que terminar de pegarla con una vincha.
Por último, cuando dio el gran salto al Barcelona, ha estrenado varios peinados, desde el rapado gracias a su compatriota Dani Alves hasta el regreso de la cresta, que es el look que mantiene ahora.
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(EZ)