Después de 28 días, la final de vuelta de la Copa Libertadores se jugó lejos de Sudamérica. Fue en el Santiago Bernabéu que se vistió de gala para recibir el Boca Juniors vs. River Plate que jugaron la revancha del choque disputado en La Bombonera por alzar el trofeo más deseado de Conmebol. Y fue un partidazo.
En casi un mes pasó de todo. Reclamos, cambios de escenario, sanciones, captura de los culpables, deportaciones. Todo, menos fútbol. Este por fin volvió este domingo 9 de diciembre y tuvo un gran ganador, la afición que pudo llegar hasta la capital española para ver la final de la Copa Libertadores.
Hubo invitados de lujo en las graderías para ver el River Plate vs. Boca Juniors. Lionel Messi, Antoine Griezmann, James Rodríguez, son algunos de los cracks del mundo que se dejaron ver en el coloso madrileño para apreciar uno de los mejores clásicos del mundo y nada menos que por la final de la Copa Libertadores.
Y no se fueron decepcionados. Europa vio en vivo cómo se juega una final de América, donde ninguno se guardó nada y cada pelota se disputó con el alma. River Plate vs. Boca Juniors fue un espectáculo aparte que esta vez estuvo marcado por la seguridad extrema.
River Plate vs. Boca Juniors, la final más larga de la Copa Libertadores, cerró su capítulo en Madrid con muchas enseñanzas de cara a la próxima temporada cuando se juegue el torneo sudamericano con final única en sede neutral.