Finalmente, se cayó el préstamo de Christian Cueva a Independiente de Avellaneda. Krasnodar, el club al que pertenece el volante de la Selección Peruana, no aceptó la oferta de los Diablos Rojos y ‘Aladino’ seguirá su carrera en la liga Premier rusa. Era muy difícil –por no decir imposible– que el Krasnodar, que hace solo seis meses pagó ocho millones de euros por Cueva, lo dejara ir tan fácilmente y menos por una cifra inferior a lo que le costó el jugador.
Lo que le toca ahora a Christian Cueva es dedicarse a jugar al fútbol y tranquilizarse. Si quiere seguir creciendo como profesional, necesita concentrarse en recuperar su mejor nivel y olvidarse de todo lo demás. No le suma nada que cada temporada, ante la menor frustración, amague con cambiar de camiseta y mandarse a mudar.
Ya le pasó en Sao Paulo. Allí, luego de un inicio auspicioso, donde destacó y fue figura, pareció desmotivarse luego y no hubo manera de reengancharlo al club, que justo pasaba por un mal momento y lo necesitaba más que nunca. Sus últimos meses en el equipo paulista los pasó jugando poco y más noticia hicieron sus reclamos para que lo dejaran emigrar.
Pasado el Mundial de Rusia, el Sao Paulo aceptó finalmente la oferta del Krasnodar y Christian Cueva cumplió su sueño de volver a Europa (en el 2013 tuvo un paso fugaz por el Rayo Vallecano). Todo apuntaba que ahora sí se enfocaría en jugar al fútbol y brillar como todos lo sabemos capaz. Pero seis meses después, Cueva no ha logrado consolidarse como titular en el Krasnodar y ya parece que, en vez de luchar por ganarse el puesto, lo que quiere es volver a cambiar de club.
Y esa película, ya le hemos visto antes.