Pasa en la vida, pasa en el fútbol. Cuánta diferencia puede haber entre las realidades de dos equipos que compartes el mismo nombre y juegan en diferentes países como es el caso de Sport Boys. El club chalaco, que acaba de salvarse del descenso en la Segunda División, tiene un homónimo boliviano que jugará la Copa Libertadores por primera vez en su historia. Aquí te lo contamos.
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Las diferencias entre uno y otro equipo son varias. Por ejemplo, el club rosado, el peruano, es el que lleva el nombre original porque fue fundado en 1927, mientras que el cuadro boliviano lo hizo recién en 1954. Otro detalle distinto está en el color del uniforme del cuadro altiplánico que viste de azul y blanco. Además de los presentes de ambos. Pero vamos a enfocarnos en este club boliviano que ha escalado mucho en los últimos tres años.
Luego de una gran campaña en la Segunda División de Bolivia en la temporada 2012-2013, Sport Boys logró disputar el Playoff por el ascenso contra Petrolero Yacuiba a quien venció en tres partidos. Esto le dio el pase a la Primera División de Bolivia en la que pasó más tiempo peleando la permanencia que una clasificación a un torneo internacional.
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Sin embargo, para la campaña 2015-2016 todo cambió. Desde la llegada del Ministro de Gobierno de Bolivia Carlos Romero a la presidencia del club y siguiendo con la contratación de un viejo conocido en el fútbol peruano como Carlos Lebb, hubo mejoras notables. El argentino llegó con el objetivo de salvar al equipo del descenso (en Bolivia se define por promedios), y terminó haciendo historia. El exentrenador de Ayacucho FC logró el primer título profesional para los Warneños.
Fue una campaña histórica la de Sport Boys en la Primera División de Bolivia que le dio la clasificación a la Copa Libertadores por primera vez, pero que no se pudo coronar con el título de la temporada porque el equipo sufrió un bajó importante y en el Torneo Clausura quedó en el séptimo lugar, pero en el acumulado le bastó para llegar al torneo de clubes más importante del continente, algo que su homónimo peruano, el del Callao, no logra desde el 2001.
Y a pesar de que Carlos Leeb hizo historia en el club boliviano, éste renunció al cargo en junio del 2016 y volvió al Perú para tomar las riendas de Ayacucho FC, club que el que logró otro objetivo: salvarlo del descenso y del cual también se fue. En su lugar acaba de ser contratado Francisco Melgar.
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