Cuando Sporting Cristal acabó el 2017, tuvo que entrar en salas de espera para retomar el camino del éxito. Y su primer paso fue buscar a un Salas, pero no de espera. A un técnico que apueste por el fútbol y muy profesional.
Desde el principio mandó en el torneo local. No de casualidad ganó el Torneo de Verano, el Apertura y se paseó con Alianza Lima en la final. Un 7-1 global que no deja dudas. Lo bueno es que, además de su gente de experiencia, mostró jóvenes jugadores como Marco López, Christopher Olivares y Johan Madrid.
Palabras aparte para el Gabi Costa, el mejor jugador del año, y a Emanuel Herrera, el goleador histórico del torneo peruano. A este Sporting Cristal no le faltó nada. Ni las cervezas para adornar su estrella 19.
Ahora viene el reto más grande: la Libertadores. Hay que trabajar y reforzarse para dar pelea en ese torneo. Por ahora, el hincha rimense ya salió de salas de espera para festejar. Salud, campeón.
Escribe: Walter Corzo